Así es el JetLev, un "jetpack" individual que va propulsado por dos enormes chorros de agua que se alimentan de una gran manguera de agua que va siempre sumergida bajo el agua. Parece fácil manejarlo pero hay que tener fuerza y requiere algunas horas de entrenamiento. Aterrizar y despegar son dos momentos bastante críticos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario